Pero mi impulso de hoy a garabatear tal titulo en la siguiente entrada no es otro que llevado a cabo por el deseo de despertar una mañana de Domingo y decir: «¡Vámonos a Paris!». Y entonces una enorme corriente de emoción me ha invadido al pensar que lo que estaba diciendo era realmente lo que deseaba, escapar a Paris.
Al mismo lugar de Moulin Rouge, donde Julia Child aprendió a cocinar, el lugar que Woody Allen desearía quedarse atrapado en el tiempo…y sobre todo un lugar donde los mayores escritores se han detenido a vivir. Hemingway tomaba litros y litros de alcohol en uno de aquellos bares donde transitaban otros artistas. Picasso tuvo allí sus mejores pinturas. E incluso sedució a Audrey Hepburn en su frase: «Paris siempre es una buena Idea».
Todos los artistas pasaron por Paris y ahora me toca a mi.
Tengo una maleta verde botella hasta los topes de ropa. Una cámara Polaroid lista junto a una Nikon. Y mientras escribo esto, mi compañero de vida, llena de vida nuestros Iphone. Solo queda media hora para salir, pues un rico filete de cerdo chisporrotea para llenar un estomago que va a viajar a lomos de un hermoso descapotable blanco, de un sueño.
El mundo de los artistas me espera, la edad de oro en pleno siglo XXI. Y aunque suena algo fantasiosa, esta es mi forma de ver el mundo, Paris me espera para relatarla.
Por ello voy a escribir cada día que pase en el camino y en mi estancia en Paris. No sé que nos espera, solo que voy a saborear cada minuto en la Ciudad del amor.
¡Disfrutad del Viaje conmigo![/vc_column_text][vc_single_image image=»2062″ css_animation=»top-to-bottom» alignment=»center» img_link_target=»_self» img_size=»large»][/vc_column][/vc_row]